A pesar de que Bidaideak estuvo por delante los cuarenta minutos, el aro repelió en el último segundo el tiro burgalés que hubiera empatado el partido. 

Ambos equipos ofrecieron un auténtico festival anotador en el que el equipo local supo mantener la calma ante el empuje visitante.

Está dejando claro el Servigest Burgos en el devenir de la liga que es un bloque compacto que compite muy bien. Ha dado la cara en todos los partidos, e incluso, es capaz de verse con una desventaja de dieciocho puntos al inicio del tercer cuarto en cancha de un gran equipo como Bidaideak, y seguir luchando hasta tener balón para empatar en el último suspiro, como ha hecho en el Polideportivo de Txurdinaga ante un Bidaideak que se había mostrado dominador en la primera parte pero que no fue capaz de matar el partido.

En menos de dos minutos el partido empezó a ponerse de cara para los locales, que acertaron en los tres tiros que realizaron, mientras que los burgaleses fallaban tres tiros relativamente fáciles. No tuvo más remedio que pedir tiempo muerto el entrenador del Servigest Burgos, lo que pareció tener un impacto inmediato en el   marcador (6 a 4 poco después), aunque el efecto fue momentáneo y los locales volvieron a despegarse poco a poco. A pesar del triple de Arredondo para el 10 a 7, Papi y, especialmente, Avendaño se echaron a su  equipo a la espalda, y en el minuto diez Bidaideak ya ganaba 20 a 9. Se entró en el segundo cuarto con unos minutos de auténtica vorágine anotadora. A pesar de ir claramente por debajo, los burgaleses no le perdían la cara al encuentro, que se convirtió en un toma y daca continuo. Un nuevo triple de Arredondo respondió a la que hasta entonces era la máxima ventaja local (27 a 16 en el minuto trece),  y otro triple del mexicano conseguía que la diferencia bajara por primera vez de los diez puntos en varios minutos, 31 a 23 en el ecuador del segundo cuarto. Tres minutos después el partido seguía por los mismo derroteros, 41 a 31, pero en los dos minutos que quedaban para el descanso parecía que los bilbaínos por fin imponían su mayor poderío físico y los equipos se dirigieron a los vestuarios con la máxima diferencia a favor de los locales, 47 a 31.

Y solo le hicieron falta unos segundos tras el descanso a Asier García para anotar un tiro de media distancia que ponía el 49 a 31, lo que hacía temer que las posibilidades burgalesas se desvanecieran  y el partido fuera a ser un paseo local. Pero nada más lejos de la realidad. Servigest Burgos no se puso nervioso y, para empezar,  impidió que la diferencia fuera a más, además de ponerse a descontar con paciencia. Una buena defensa y un juego coral en ataque, donde todos tenían su dosis de protagonismo, permitió a los visitantes culminar  con un fulgurante contraataque un parcial de 2 a 10 que les volvía a colocar a diez puntos en el minuto veinticuatro,  51 a 41.  Un  poco más tarde, un acertado Cristian anotaba el 55 a 47 y rompía la barrera psicológica de los diez puntos, reafirmando el trabajo burgalés y mostrando a los locales que iban a tener que luchar mucho para conseguir la victoria, como pudieron comprobar cuando  Servigest Burgos conseguía  irse al final del tercer cuarto 58 a 51. No pareció ponerse nervioso el equipo local, que pudo mantener a raya  a los de Feriani, a pesar del 60 a 54 a falta de ocho minutos, ya que dos canastas seguidas del veterano Avendaño situaron el 64 a 54 que alejaba a los locales con todavía seis minutos por jugar. Es entonces cuando el Servigest consigue un parcial rápido de 0 a 5,  dos tiros libres de Cristian colocan el 64 a 59, pero que es respondido rápidamente por Avendaño con una canasta y adicional que devolvía los ocho puntos de diferencia a los locales. El partido no daba tregua y era un auténtico espectáculo  para los aficionados reunidos en el Polideportivo de Txurdinaga   y los que lo estaban viendo a través de internet, que presenciaron  como los burgaleses volvían a recortar, y mediante un triple del “Flaco”  se acercaban hasta el 67 a 64. El partido tenía un ritmo trepidante  y otro triple del “Flaco” reducía todavía más la diferencia, 69 a 67con todavía algo más de tres minutos por jugarse. Poco después,  un tiro libre de Alejandro García llevaba el 69 a 68 y apretaba todavía más el marcador. Los dos minutos siguientes supusieron un brillante intercambio de canastas  que mantenía el marcador apretado, siempre entre uno y tres puntos de diferencia a favor de los locales. Con veinticuatro segundos por jugarse, los burgaleses fallaron el triple para el empate, aunque fueron capaces de recuperar rápidamente el balón y anotar el 79 a 77. Quedaban solo doce segundos, y tras el tiempo muerto local, la rápida falta visitante llevó al tiro libre a Asier García, que encestó los dos y volvió  a dejar  al Servigest Burgos con balón y tres puntos por descontar. No pudo ser, y en el último segundo el tiro visitante estuvo a punto de entrar  pero no lo hizo, y la victoria se la quedó un Bidaideak que había dominado en el marcador los cuarenta minutos.

Servigest Burgos ahora tendrá que recuperar el otro partido que tiene aplazado el próximo miércoles  en Valladolid frente Fundación Aliados.

BIDAIDEAK BILBAO BSR 81:

Papi  (18), Lorenzo (19), García Pereiro (14), Avendaño (26), Pérez (-) –cinco inicial- García Ingelmo (-), Mouriz (2), Mcsorley (2), Mendiluce (-), Bashir (-)  y Labiano (-)

SERVIGEST BURGOS 78

Martínez (21), García (8), Gómez (24),  Arredondo (19) y  Sallis (6) -cinco inicial-  Freeman (-), Ayoub (-), Ubri (-),  Alvaro (-)  y  Abdoul (-)

Parciales: 20-9; 27-22 (47-31); 11-20 (58-51) 23-27 (81-78)

Arbitros: Uruñuela, López y De la Piedad. Señalaron  19 faltas a los locales y 13 a los visitantes. Sin eliminados.