Servigest el Cid Burgos fue profeta en su tierra. El conjunto de Jesús Escudero se impuso en la IX Copa Fecledmi de Baloncesto en Silla de Ruedas contra pronóstico y rompió con la hegemonía del Fundación Grupo Norte Valladolid. Los locales aprovecharon las bajas del actual campeón de la División de Honor para imponer su altura debajo de la pintura. Con el argentino Cristian Matías –ex del Lagun Aro- como maestro de ceremonias, consiguieron acabar con años de hegemonía morada en el Trofeo regional.

El equipo burgalés estrenó la temporada de su desembarco en la máxima categoría del baloncesto adaptado de la mejor manera posible. Vislumbró el potencial de una plantilla larga que tendrá materia prima para no pasar de puntillas en la competición. Con el ex del Getafe, Jason Walley, en el papel de pívot destacado junto con Xavi Escuder, los burgaleses demostraron su poderío en el primer partido del Torneo contra el recién formado Orto Tres Cruces Zamora (32-15). La fogosidad de los debutantes, unida a la diligencia de Pablo Martín –entrenador y jugador de los zamoranos-, evitó que los locales se marcharan en una primera parte de tanteo en la que destacó Manu y un Escuder deseoso de agradar debajo del aro.

La segunda, en un Campeonato donde solo hubo dos tiempos de 10 minutos en cada encuentro, fue otra historia. Al acierto de Escuder se unió el nivel de Walley en el rebote ofensivo y defensivo, y el partido se acabó. Solo el visitante Chema era capaz de nivelar un choque entre dos equipos al que separan dos divisiones.

Los de Escudero cogían carrerilla en un triangular en el que acostumbran a colgarse la medalla de plata. El choque entre vallisoletanos y zamoranos también se decantó del lado de los del Pisuerga por un claro 33-8, en el debut del norteamericano Jose Leep. El ex de Toledo exhibió su destreza sobre la silla y una velocidad que terminó por romper el entramado defensivo del Orto Tres Cruces.

El encuentro entre vallisoletanos y burgaleses sería el definitivo para coronar al nuevo campeón regional de una disciplina deportiva en la que Castilla y León puede presumir de momento, con dos equipos en la máxima categoría nacional y una cantera en auge.

El choque no defraudó. El Servigest se encomendó a la dirección de Cristian para imponer un ritmo más pausado del que le interesaba a los rápidos jugadores del Grupo Norte. Con la supremacía de Walley y el propio pívot argentino debajo de la pintura, el partido se puso muy cuesta arriba para los visitantes. Sin los centímetros de Diego de Paz, con la selección nacional en el Europeo y los del canadiense Adam Lancia, los morados no pudieron hacerse con el rebote en ninguna de las dos zonas. «Gigantes contra enanos», llegaron a calificar los vallisoletanos que, aún así, recortaron distancias en una segunda parte de presión que maquilló el resultado final (32-20).